Este tipo de noticias siempre son una pena, pero en esta temporada se siente más aun la tristeza, ya que son temporadas de alegría, felicidad y familia. Selena Gomez tuvo que cancelar los conciertos que daría en Chicago y en Seattle, obviamente por razones familiares. En estos momentos su lugar, como bien lo dijo, es con su familia apoyándolos y consolándola.
Ojala que se recuperen pronto y puedan pasar una Navidad alegre, y puedan rápidamente superar esta triste noticia. Selena deberá de retomar rápidamente sus compromisos profesionales después de la Navidad, y también deberá de sustituir los conciertos que, con toda razón, tuvo que cancelar.
Esperemos que su mamá se encuentre bien y que este triste incidente no haya generado ninguna consecuencia que les impida buscar en un futuro el bebé que tanto querían.
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